sábado, 11 de noviembre de 2017

Menorca un Lugar para Soñar

Es posible ser feliz si te lo propones, es posible ser feliz si luchas por tus sueños, es posible ser feliz si alcanzas un ideal.

La vida es demasiado intensa e interesante cómo para aburrirse, siempre hay películas que ver y libros que leer y un amigo al que llamar.

La vida es demasiado corta cómo para vivir agobiado por los problemas, sin duda a veces la mejor opción es desconectar y tomarse unos días de vacaciones y quién dice días dice unas semanas y quién dice unas semanas dice unos meses.

Evidentemente todo se consigue en esta vida con esfuerzo y si puedes disfrutar de unas merecidas vacaciones es que has estado trabajando para ello, tu trabajo te lleva ahora a disfrutar de tu tiempo libre, a disfrutar de tu ocio.

En Menorca podrás comer el marisco más fresco y más natural y más escogido en los mejores restaurantes de los blancos e impolutos pueblos que forman la comarca y que asemejan un cuento con final feliz...y todo eso es para ti, para que lo disfrutes.

Menorca tiene calas salvajes de fina arena blanca en la que poder gozar de las playas vírgenes que son la predilección de los turistas más avezados y más exigentes, dominio del placer sin parangón.

Si te gusta hacer excursiones hay un camino rodeando toda la comarca en el que poder hacer recorridos en bicicleta o hacer un trote suave con unos buenos playeros y un chandal.

Y si te gusta navegar por el mar tampoco tendrás ningún problema, ahora pienso en lo maravilloso que sería estar allí, volver a estar en Menorca. Recuerdo aquel emporio de tiendas y quioscos y bares de paredes naranjas que había frente a la playa a la que acudían los turistas en autobuses, una playa grande con un buen chiringuito aunque lo que más me gusto fue el emporio de tiendas de paredes naranjas y techos bajos al lado de quioscos inmersos en la estructura y souvenires y regalos...Tal vez un poco artificial y para los turistas pero muy agradable y bonito y acogedor, en medio de un clima maravilloso y frente a un mar azul brillante y cálido.

Menorca, un lugar para soñar.